El arte de la cata de vinos: Rioja reserva (II)

En esta ocasión la serie de Cincuentopía dedicada a la cata de vinos centra su atención en los vinos de Rioja reserva. Se trata de la segunda entrada dedicada a esta modalidad tras la que publicamos en noviembre de 2017.

Como de costumbre, para la redacción de este contenido contamos con la inestimable colaboración del gran experto en enología, Jesús Bernad, cuyo canal en Vimeo constituye una referencia de primer nivel para quienes deseen profundizar en todo lo que tiene que ver con la cultura del vino.

Hablar de los vinos de Rioja reserva es centrarnos en una marca de reconocida excelencia que emplea las mejores barricas y procede de las mejores uvas y de las viñas más viejas. En esta ocasión Jesús Bernad analiza cuatro vinos correspondientes a esta modalidad: Viña Pomal Alto de la Caseta 2007 (Rioja Alta), Marqués de Riscal Finca Torrea 2007 (Rioja Alavesa), Beronia Selección 198 Barricas Reserva 2005 (Rioja Alta) y Dinastía Vivanco Reserva 2005 (Rioja Alta).

Dejémonos acompañar por Jesús Bernad en el vídeo donde explica las principales características de los cuatro caldos seleccionados.

Para disfrutar de los vinos de Rioja reserva apostemos por un entorno silencioso y bien ventilado y utilicemos copas de cristal de calidad que nos permitan apreciar cada uno de sus matices. Como siempre recomendamos desde nuestro portal, procedamos a su consumo con moderación.

Ofrecemos a los seguidores de Cincuentopía la totalidad de las entradas referidas a la serie sobre la cata de vinos.

• Crianza Rioja
• Crianza Ribera del Duero
• Vinos de Toro
• Vinos rosados de Navarra 2011
• Chardonnay españoles
• Rioja Reserva
• Rueda Verdejo
• Uva syrah
• Riesling de Mosela
• Vinos blancos de Rías Baixas
• Rioja Gran Reserva
• Malbec de Mendoza de Argentina
• Uva garnacha de Campo de Borja
• Vinos de Sudáfrica
• Vinos de California
• Ribera del Duero Roble
• Vinos de Chile de O. Fournier
• Cavas y vinos espumosos
• Champagnes

«Dejadme aprovechar -escribió- el afecto que todavía hay en mí, para contar los aspectos de una vida atribulada y sin reposo, en la que la infelicidad acaso no se debió a los acontecimientos por todos conocidos sino a los secretos pesares que sólo Dios conoce».