Hace ya más de ocho décadas del fallecimiento de la pintora española María Blanchard pero su legado artístico permanece en el tiempo. Nos aproximamos a su vida y obra a través de estas líneas que pretenden ser un sentido homenaje a su capacidad artística.
María Blanchard (1881-1932) nació en Santander. Apenas hay fotografías de la pintora, quizá porque padecía una cifoscoliosis con doble desviación de columna como consecuencia de una caída que había sufrido su madre cuando estaba embarazada. No obstante el escritor Ramón Gómez de la Serna la describe como “Menudita, con su pelo castaño despeinado en flotantes abuelos, con su mirada de niña, mirada susurrante de pájaro con triste alegría”.
Tras el fallecimiento de su padre la familia se traslada a Madrid. Comienza su periodo de formación (tanto en Madrid como fundamentalmente en París) con artistas de la talla de Fernando Álvarez de Sotomayor, Manuel Benedito, Anglada Camarasa o Krees van Dongen. Su pintura durante esta época se caracteriza por sus tonos sobrios, su dibujo firme y su factura académica.
En 1915 María Blanchard obtiene una cátedra de Dibujo en la Escuela Normal de Salamanca pero pronto la abandona y se traslada de manera definitiva a París. En esa ciudad entra en contacto con la estética cubista, sobre todo a través de Juan Gris, si bien este movimiento tuvo una influencia efímera en su obra.
A partir de 1920 la pintora se adentra en una propuesta sustentada en la figura humana, con colores que se poetizan y figuras que aparecen sumidas en un ambiente abstracto, meditabundo y triste.
María Blanchard fallece en París, asfixiada por las penurias económicas y física y psíquicamente agotada. Su pintura había sido por completo incomprendida por parte de la crítica y del público en España.
En la actualidad la obra de María Blanchard se encuentra repartida por distintas pinacotecas mundiales en Amsterdam, Bruselas, Ginebra, Grenoble, Nantes y París. En el caso concreto español los Museos de Bellas Artes de Bilbao y Santander cuentan con algunos cuadros sumamente interesantes. Además, el Museo Reina Sofía de Madrid posee una nutrida colección de sus trabajos, accesible desde este enlace.
[author] [author_image timthumb=’on’]https://cincuentopia.com/wp-content/uploads/2015/06/logo-google-.jpg[/author_image] [author_info]Cincuentopía«Dejadme aprovechar -escribió- el afecto que todavía hay en mí, para contar los aspectos de una vida atribulada y sin reposo, en la que la infelicidad acaso no se debió a los acontecimientos por todos conocidos sino a los secretos pesares que sólo Dios conoce». [/author_info] [/author]
