El oscarizado director de fotografía James Wong Howe realizó un documental en 1954 protagonizado por el acuarelista de fama mundial Dong Kingman pintando acuarela al aire libre en Nueva York concretamente en el barrio chino. Ambos tenían en común que eran hijos de inmigrantes en Estados Unidos y que trabajaron para la industria del cine.
Acerca de James Wong Howe
Nacido en Taishan en 1899 llegó a Estados Unidos con 5 años acompañando a su familia, pues su padre había conseguido un empleo en el Ferrocarril del Pacífico Norte. El fallecimiento de su padre supuso un interregno en su temprana pasión por la fotografía que cambió por varios trabajos ocasionales incluido el boxeo, hasta que un encuentro casual le devolvió al mundo de la fotografía a través de la Famous Players-Lasky Corporation, una de las más famosas productoras de cine mudo.
Como resultado, el propio Cecil B. DeMille alentó su carrera, ya que trabajó como ayudante de su director de fotografía Alvin Wyckoff. La confianza de actores y directores como Howard Hawks le permitió mantener la necesaria continuidad en su trabajo para perfeccionar su propia técnica: la iluminación de las estrellas del cine utilizando terciopelo negro alrededor de la cámara o gasa sobre ella para suavizar las facciones. Se especializó en el uso de sombras y en el enfoque profundo, lo cual permite que tanto el primer plano como el lejano permanezcan enfocados, siendo uno de los primeros en utilizarlo, incluso antes de que Gregg Toland lo hiciera en Ciudadano Kane.
Trabajó con Greta Garbo, Spencer Tracy, Rock Hudson, entre otros. Se dice que Paul Newman, con quien trabajó en la película Bud, en la que daba la vida a un asesino de mujeres, nunca resultó tan atractivo en la pantalla. Recibió 10 nominaciones a los Óscars y en 1956 ganó su primer Premio de la Academia por La rosa tatuada, protagonizada por Burt Lancaster. Este último quedó tan satisfecho con su trabajo, que exigió su participación en la película Chantaje en Broadway, dirigida por Alexander Mackendrick en 1957. Directores como Fritz Lang, Frank Borzage, Raoul Walsh , Busby Berkeley, William K. Howard,. Con el director John Frankenheimer realizó uno de sus últimos trabajos Seconds. en la que incorporó el ojo de pez y el gran lugar que contribuyeron a dotar a la historia de un extraño expresionismo.
A pesar del éxito y de codearse con las más rutilantes figuras de Hollywood, no consiguió convertirse en un ciudadano estadounidense hasta la derogación de la Ley de Exclusión China de 1943. En 1937 contrajo matrimonio en París con la novelista Sanora Babb y debido a las leyes contra el mestizaje, el matrimonio no fue legalmente reconocido en los Estados Unidos hasta 1949.
Dirigió el documental Go Man Go (1954) sobre los Harlem Globetrotters, además del que constituye nexo de unión entre las dos personalidades que hoy relacionamos, el mencionado documental de 1954 realizado sobre el acuarelista Dong Kingman.
Acerca de Dong Kingman
En 1909 el artista conocido como Dong Kingman nació en Oakland, California, como Dong Moy Shu y era hijo de inmigrantes chinos de Hong Kong. Al estallar la Primera Guerra Mundial su padre decide retornar a Hong Kong. Desde muy joven el artista mostró cualidades artísticas tanto en la caligrafía china como en la pintura con acuarela. En Hong Kong comienza su enseñanza convencional, estudiando en la Escuela Bok Jai y, donde recibió el apodo de King Man (lit. «paisaje» y «composición» en cantonés) para reflejar su ambición por ser pintor. Ya adolescente, fue enviado a Lingnan Branch School en la que impartía clase Szetsu Wai, un pintor chino muy respetado formado en París, donde se formó en el arte chino tradicional y en el uso de la luz de los impresionistas franceses.
En 1929, Kingman regresa a los Estados Unidos para proseguir su formación artística en la escuela de arte Fox Morgan que compatibiliza con exposiciones colectivas y con trabajos de baja categoría para subsistir. En 1936 despega su carrera: es contratado como artista por el gobierno federal para la Administración de Proyectos de Obras, un programa de infraestructura y empleo vigente durante la Gran Depresión. Celebra su primera exposición de arte en solitario en el Centro de Arte de San Francisco. Consigue un trabajo como docente en la Academia de Arte Publicitario de San Francisco. Cuando Estados Unidos entra en la Segunda Guerra Mundial, es reclutado pero gracias a la intercesión de una de sus admiradoras, Eleanor Roosevelt, fue transferido para trabajar como cartógrafo en la Oficina de Servicios Estratégicos en Washington, DC y Camp Beal, California.
Después de la guerra, su carrera resulta apabullante. Se muda a Brooklyn, Nueva York y se asocia con las galerías Midtown, Wildenstein y Hammer. En cuanto a su carrera docente, se incorpora a la Universidad de Columbia y al Hunter College. Su carrera docente continúa con la Escuela de Artistas Famosos en Westport, Connecticut, en la que coincide con Will Barnet, Stuart Davis, Norman Rockwell y Ben Shahn. También impartió clases durante cuarenta años integrado en el Hewitt Painting Workshops, un grupo que organiza giras de pintura por todo el mundo. Además, formó parte de la facultad y la junta de la Academy of Art College en San Francisco, de la que recibió un doctorado honoris causa.
Sus incursiones en la cinematografía tuvieron distintas vertientes como diseñador gráfico: para crear el ambiente en películas de Hollywood como Prometidas sin novio y 55 días en Pekín. También contribuyó con obras de arte para películas como King Rat, The Sand Pebbles y Lost Horizons . (1973), entre otros. En 2000, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas realizó una exhibición destacando las contribuciones de Kingman a la industria en el Centro de Estudios Cinematográficos de la Academia en Beverly Hills, California.
Sus pinturas urbanas y paisajes dotadas de un particular simbolismo y fantasía, realizadas con una aparente espontaneidad en los pequeños detalles, aunque con un preciso dibujo como base. Fiel a su estilo resulta difícil encuadrarle en un movimiento artístico, si bien se le considera uno de los representantes de la Escuela de California.
Fue el primer artista estadounidense en participar en una exposición individual desde la reanudación de las relaciones diplomáticas entre la República Popular China y Estados Unidos.
[author] [author_image timthumb=’on’]https://cincuentopia.com/wp-content/uploads/2015/06/logo-google-.jpg[/author_image] [author_info] Cincuentopía. «Dejadme aprovechar -escribió- el afecto que todavía hay en mí, para contar los aspectos de una vida atribulada y sin reposo, en la que la infelicidad acaso no se debió a los acontecimientos por todos conocidos sino a los secretos pesares que sólo Dios conoce». Memorias escritas al cumplir los 50 años por la Marquesa de la Tour du Pin, dama de corte de María Antonieta [/author_info] [/author]