Desde el pasado día 11 de julio el actor y modelo estadounidense Justin Chambers es miembro de pleno derecho del Club de Cincuentopía. Veamos cómo ha llegado a conseguirlo.
Justin Chambers nació en la localidad de Springfield, dentro del Estado de Oregón. Se da la circunstancia de que cuenta con un hermano gemelo, Jason, al que también damos la bienvenida a nuestro club.
Inició su carrera como modelo publicitario en la década de los noventa, representando marcas como Calvin Klein, entre otras. No obstante, desde el primer momento se sintió atraído por el mundo de la interpretación, cursando estudios en Nueva York.
Ya a comienzos del siglo XXI Justin Chambers se labra una paulatina carrera en la industria audiovisual, en la que compagina pequeños papeles en el cine con intervenciones cada vez más destacadas en series de televisión. Su gran salto hacia delante tiene lugar en 2005, cuando se anuncia su participación en la serie Anatomía de Grey, donde a lo largo de quince temporadas representa el papel del cirujano Alex Karev, por el que obtuvo el Premio del Sindicato de Actores en 2007.
Su paso por la serie le otorga la fama a escala internacional y facilita su participación en películas de considerable presupuesto, entre las que figuran The Zodiac o Broken City, en papeles protagonistas.
En la actualidad Justin Chambers se encuentra en pleno proceso de redefinición de su carrera en la industria cinematográfica, tras su súbito abandono de la serie que tanta fama le había proporcionado durante una década y media.
Desde aquí le damos la bienvenida al Club de Cincuentopía y le deseamos el mayor de los éxitos en sus nuevos proyectos.
Entre los últimos componentes que forman parte de este Club figuran:
[author] [author_image timthumb=’on’]https://cincuentopia.com/wp-content/uploads/2015/06/logo-google-.jpg[/author_image] [author_info]Cincuentopía«Dejadme aprovechar -escribió- el afecto que todavía hay en mí, para contar los aspectos de una vida atribulada y sin reposo, en la que la infelicidad acaso no se debió a los acontecimientos por todos conocidos sino a los secretos pesares que sólo Dios conoce».
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